jueves, 17 de mayo de 2012

Voy a tomar tu mente por sorpresa y cuando te des cuenta, estaras pensando en mi, con el corazon...

Ese sentimiento de quererte matar a besos me consume poco a poco cuando te acercas a mí sin miedo y sin nada que temer, como si no te importara lo que la gente pudiese estar pensando acerca de nosotros, acerca de ti y de ella, acerca de mí, acerca de nosotros.

¿Cómo te atreves a mirarme así, nada más? Llegas con tus ojos y sin decir nada, tratas de retarme a que haga algo, pero, mi vida, ¿qué podría hacer yo? Nada.

Me encantas. Me fascinas y me inquietas y me preocupas y me pongo sin discurso elocuente alguno cuando estoy contigo.

Esto es más que nada una mezcla entre cariño y coraje, coraje que te excita de vez en cuando a pensar en hasta dónde podré llegar a disimular lo que siento por ti y a veces también te da este sentimiento de impotencia que te deja como indiferente y que me deja como por dejarlo todo.

Después de tanto y después de todo, sigues siendo tú el único hombre que despierta mis ojos y me deja por pensar en la verdadera situación en la que estoy metida.

Mis sentimientos me han metido en este problema y supongo que es hora de seguir adelante, tú me lo pides a gritos y sin embargo, yo me muero de ti, mi vida. Eres tú lo que no estaba buscando, pero encontré de la nada un día.

Te quiero, te odio y de igual manera siempre estoy pensando en ti y en arrancarte esa sonrisa para pretender que siempre fue mía y de ninguna otra.



martes, 15 de mayo de 2012

Tiempo...

Tiempo, eso es lo que necesitamos ahora mismo.

Debemos dejarnos, ignorarnos, herirnos y extrañarnos por un tiempo.

Búscame cuando ya no puedas fingir más, búscame cuando me necesites porque ése será el momento más adecuado para que reanudemos esta historia de amor tan bizarra, complicada y extraña que escribí una madrugada en la que sufría de una sobredosis de sentimientos.

Nunca esperé que mis historias se volviesen realidad, pero me dio gusto que no me dejaras huir antes, me dio gusto que intentaras y aún me duele haberte perdido.
Sin embargo, mi vida, ahora lo único que necesitamos es tiempo.